1928

¡Ey, amigos! Si buscáis una experiencia única en buena comida, tenéis que conocer el restaurante 1928 en el Royal Hideaway Hotel en Canfranc-Estación. Este sitio mola porque está en un vagón restaurado de la histórica Estación Internacional de Canfranc, y el chef Eduardo Salanova le da un giro brutal a la cocina francesa con toques locales. Así que, si os apetece un plan top con vistas chulas, no dudéis en reservar una mesa. ¡Las críticas son de 9.8/10 en TheFork!

La carta de 1928

Entrantes:

- Ostra con sabayón

- Bogavante confitado, espuma de erizo y chips de coco

- Trucha

- Albóndigas de ternera con puré de trufa

Principales:

- Arroz meloso con rodaballo

- Arroz Niral de Alcolea de Cinca meloso con rodaballo, ratatouille de la Provenza, romesco y aire de tomillo

- Garé de L'aquitane

- Rodaballo

Postres:

- Migas dulces

Bebidas:

- (No hay información de bebidas en las reseñas)

Cómo es la comida en 1928

Si buscas un lugar chido para comer, este restaurante te va a dejar flipando. La calidad de la comida es un 10 de 5. Todo está exquisito, sin dudarlo. Y si piensas en la variedad de la carta, prepárate, porque es sorprendente, hay de todo para que no te aburras.

Además, los aperitivos son otra cosa: te sorprenden con dulces caseros que son una locura y hasta tienen detalles como sorpresas por cumpleaños. ¡Te hacen sentir especial! Y no te preocupes si tienes intolerancias o alergias, aquí son bien atentos, así que tienen flexibilidad para que todos puedan disfrutar.

Cuando se trata de sabor y presentación, no te voy a mentir, es artística y sorprendente. Cada plato parece una obra de arte y está súper bien presentado, así que además de llenar la panza, se te hace la boca agua solo con verlo. ¡No te lo pierdas!

Cómo son los precios de 1928

Si estás pensando en darte un capricho y visitar este restaurante, prepárate porque los precios de los platos y bebidas rondan entre 90 y 100 €, así que no es el lugar más barato del barrio. Pero oye, merece la experiencia. Si te va la aventura gastronómica, la inversión puede valer la pena. También hay opciones en el rango de 80 a 90 €, pero, sin duda, si buscas algo especial, ve preparado para gastar un poco más.

En cuanto a las ofertas y promociones, la cosa sube de nivel y podemos hablar de menús cerrados por más de 100 €. Si quieres sacar el máximo provecho, quizás te convenga mirar estas opciones y ver si se ajustan a tu presupuesto. Sin duda, los precios son algo elevados, pero la relación calidad-precio es sólida, muchos coinciden en que merece la pena vivir la experiencia al menos una vez.

Así que ya lo sabes, si quieres salir a impresionar y disfrutar de una buena comida, este sitio tiene lo que buscas, solo que tendrás que aflojar un poco la cartera. ¡Buena suerte y buen provecho!

Cómo es el personal en 1928

Cuando llegas a este restaurante, la atención del personal es simplemente impecable. Son esmerados y súper atentos, así que no te sentirás abandonado ni un momento. Además, olvídate del estrés de esperar, aquí, no hay espera para nada. Te despachan al instante, lo que se agradece un montón.

Si tienes dudas sobre qué pedir, no te preocupes. El personal te asesora en la elección de platos y vinos, así que te va a ayudar a acertar seguro. Pero ojo, si quieres conseguir mesa, es necesario reservar con bastante antelación. La reserva es obligatoria, así que mejor que no lo dejes para última hora porque se llenan rápido. Así que ya sabes, si planeas una salida, ¡asegúrate de reservar para no quedarte sin mesa!

Cómo es el local del 1928

El lugar tiene un nivel de ruido muy bajo, así que puedes charlar sin problemas y disfrutar de una buena conversación. La decoración es muy especial, como si estuvieras en un vagón de tren restaurado, lo que le da un toque único y diferente. La atmósfera te transporta al glamour de los locos 20, y parece que has viajado en el tiempo a 1928. Todo este rollo vintage le da un aire elegante y acogedor, perfecto para disfrutar de una buena comida. Este sitio no es solo un restaurante, es toda una experiencia que vale la pena vivir.

Otros servicios que ofrece 1928

Si estás buscando un sitio para disfrutar sin los peques a tu alrededor, este restaurante tiene claro que aquí no se aceptan niños. Así que, si quieres un rato de tranquilidad, este es tu lugar. Además, si prefieres quedarte en casa o simplemente no te apetece moverte, ofrecen servicio a domicilio para llevar. ¡Perfecto para esos días en que solo quieres estar en pijama!

Y para que no te preocupes por dónde aparcar, el lugar tiene muchas plazas libres y es aparcamiento gratuito. Así que no tendrás que estar dando vueltas buscando dónde dejar el coche.