Ermita Santa María de Dulcis

Ey, ¡chicos! Si alguna vez andan por Buera en Huesca, no se pueden perder la Ermita de Santa María de Dulcis. Este lugar tiene un rollo histórico y religioso que atrae a un montón de gente cada año. El actual santuario, construido en el siglo XVII, se levantó sobre un viejo templo románico y tiene ese toque barroco aragonés que mola un montón. Para llegar, solo hay que dar un paseo de unos dos kilómetros por caminos rodeados de almendros y viñedos. Es un sitio de romería en mayo, donde se juntan los vecinos de la zona. Además, el interior está decorado con un estilo mudéjar que hay que ver. ¡Así que ya saben, cuando estén por ahí, a dar una vuelta por Dulcis!